La 85 Jean Bouin

Frío...

Entrenamientos durante una de las semanas más frías y duras de 2008, temperaturas rascando los 5ºC, la Tramuntana, viento aguerrido, queriendo agudizar las bajas temperaturas y paralizando el cuerpo el día de hacer las series, y la lluvia... fría, racheada y molesta.

En resúmen, la equipación de invierno ha hecho gala de sus buenas cualidades...

... e inquietud...

... porque esta semana tenían que examinar concienzudamente el estado de mi salud en el Centre d'Alt Rendiment Esportiu de Sant Cugat del Vallès:

Los temores afloraban ante cualquier gesto, ante cualquier palabra indeterminada del personal sanitario.

Pero el diagnóstico ha sido muy positivo: mi sistema cardiovascular está en perfecto estado, así como la ventilación pulmonar, la oxigenación y el intercambio gaseoso celular... y la recuperación de la frecuencia cardíaca.

Excepto una amenazante escoliosis que padezco desde niño, y a la que no he de perder de vista, nada impide ya el poder comenzar a competir y disfrutar de ello.

Por eso hoy he vuelto al mundo de las carreras, y lo he hecho a una de las clásicas, la más antigua, hacía la edición nº 85, siempre con ese ambiente familiar, deportivo y romántico que la caracteriza: la Jean Bouin.

.

Además de acudir con los compañeros de mi club de atletismo, Jotaeme, Jaume y Karli, también pude saludar a Albert Gràcia y a Joan Josep, con todos ellos compartiendo el calentamiento y los momentos previos a la carrera.

.

Con Jaume, Karli y Jotaeme.

.

Con Joan Josep.

.

Tras el pistoletazo, a correr por las calles de Barcelona, con la idea de intentar registrar un sub 50 min: los kilómetros fueron pasando sin solución de continuidad, aunque los cuádriceps de la pierna derecha pedían tregua durante el largo tramo de la Gran Vía.

Pero hacia el km 5, bajando por el Paseo de Sant Joan he visto a Karli que iba tocado, quien a partir de ese momento ha decidido acompañarme para el resto de la carrera.

Manteniendo el ritmo siempre por debajo de 5 min/km enfilé la Avenida del Paral·lel, de contínua subida, y en donde he visto que me encontraba mucho mejor de lo que esperaba.

Al final, la famosa y temida subida por la Calle Lleida, apretando los machos como todo el mundo y con Karli siempre a mi lado para bajar lanzado y lleno de satisfacción a la meta de la Avenida María Cristina, en donde me esperaban ya Joan Josep y Jotaeme para compartir con ellos un emocionado abrazo.

.

Esto ha sido volver a competir desde la lejana Núria -Queralt del 1 de julio de 2007... ha llovido tanto... y acabar este primer 10mil en 47:55, a un promedio de 4:47 min/km, en el puesto 1.784 de un total de 5.000 atletas, me ha llenado de felicidad... y las endorfinas me salen hasta por las cejas...

Y en medio de tanto frenesí aparecieron Òscar y Gemma, fenomenal pareja de deportistas con los que tendré la suerte de volver a coincidir en la Media Maratón de Vilanova i la Geltrú de aquí a 2 semanas.

.

Con Gemma y Òscar.

Al finalizar, Barcelona, luminosa ,se extendía detrás de mí hasta Collserola, aguardándome quien sabe si para la cita con Filípides...