2 de junio de 2012

Travessa del Montseny 2.012: Sobreponerse a los elementos.

Por 6ª vez acudía a participar en la Travessa del Montseny, que atraviesa de Oeste a Este este macizo del interior de Catalunya, entre Aiguafreda y Gualba, con un total de 47 kms con 5.060 m de desnivel total acumulado. Y por primera vez en estos 6 años me encontré con la lluvia, alguna vez tendría que ser.La verdad que las previsiones no eran demasiado optimistas, pero es que ya antes de emprender el viaje desde El Maresme, a las 3:30 horas, ya se formó la tempestad.Al llegar a Aiguafreda la lluvia y los relámpagos no cesaban. Enseguida retiramos la tarjeta de ruta y nos pusimos en la cola para la salida, bajo una incesante lluvia y ocupando posiciones adelantadas en el cajón, son los beneficios de madrugar y llegar pronto. Por allí me encontré a Toni de Arriba.


 Haciendo cola en el cajón de salida bajo la lluvia.
Y a las 5:00 se abrió la salida a los 500 participantes, en medio de una tormenta que poco a poco tendería a desplazarse hacia el norte.En las primeras posiciones no hay tregua y así el ritmo era muy rápido, más de lo que podía permitirme. Aflojé al entrar en el sendero de subida a Tagamanent. Paco del Moral, con quien realicé íntegramente la prueba, seguía mis pasos para no darme presión y poder ir a mi aire. El sendero bajaba lleno de agua por el aguacero y dificultaba el paso, suerte que iba en el grupo delantero y aún no se había formado barro. En poco más de 1 hora llegamos al Castell de Tagamanent, tras una subida de 5 kms y 750 m de desnivel. Allí clareaaba el día y apagamos los frontales.

 Primeras rampas, subiendo por la pista de Tagamanent bajo la lluvia y la oscuridad de la noche.
 
 Vistas sobre el Vallès a las 6:00 desde el Castell de Tagamanent.

 Francisco del Moral, pasando por delante de Bellver.

 Tagamanent desde Bellver.

En el tramo del Pla de la Calma Paco marcó un ritmo que intenté seguir como pude. Se me hizo muy corto. Los 9 kms se me pasaron volando y cuando me quise dar cuenta ya estábamos en Collformic, aún seguía chispeando y a aquella altitud, 1.145 m, el día se mostraba muy frío.

 Llegando a Collformic. Los toboganes del Pla de la Calma se me pasaron volando.

En la subida a Matagalls, de 550 m de desnivel, podíamos contemplar cómo el Vallès estaba despejado, pero llegaban rumores de truenos desde la Costa del Maresme, muy encapotada y oscura. Unos tentáculos de niebla que llegaban rapidísimamente desde el fondo del valle me hicieron presagiar que aquella tormenta acabaría por afectarnos también.La meteorología cambiante de la alta montaña es fascinante y en pocos minutos todo quedó tapado por una densa, oscura y fría niebla que corría arrastrándose entre las piedras y los matojos de las desnudas vertientes del sur de Matagalls. La lluvia hizo acto de presencia y nos acompañó de nuevo hasta casi llegar a Sant Marçal.El control de Matagalls daba miedo. Dos voluntarios agazapados dentro de una tienda se ocupaban de fichar a todo el mundo, el frío era muy intenso y marchamos rápidamente.

 Subiendo a Matagalls. La niebla lo tapaba todo.

 En la subida a Matagalls comenzaba a llover de nuevo.

 Por momentos la visibilidad era casi nula.

 La Creu de Matagalls y la tienda con los voluntarios del control. Un 10 para ellos.

La entrada en el hayedo de Sant Marçal, pasando por el encantador Coll de Pregon, fue un alivio para el cuerpo, la mente y el alma. El viento cesó, la temperatura se templó y dejó de llover. Además, con una primavera tan lluviosa, el bosque estaba exuberante, con tonos verdes que quitaban el sentido. Después de bajar 600 m llegamos al control de Sant Marçal, km 23, este año en otra ubicación, justo cuando salía el sol.

 Bajando a Coll de Pregon.

 Bajando a Coll de Pregon.
 
 Llegando a Coll de Pregon, uno de esos lugares donde quedarse a vivir para siempre.
 
 El hayedo de Sant Marçal. La niebla diluía el verde resplandeciente de las hojas.

 Bajando a Sant Marçal.

 El hayedo de Sant Marçal, con las hojas caídas durante todo el invierno.

 Talonando en la pronunciada bajada a Sant Marçal.
 
Tras comer algo sólido emprendimos la subida a Les Agudes, de 617 m de desnivel por el novedoso sendero GR5 para no tener que pasar por Castellets, en fase de regeneración biológica, medida además acertada por la peligrosidad del tramo de escalada. La nueva subida, con 1 km adicional, se hizo eterna, con rampas de fuerte pendiente que hicieron flaquear a más de uno.Arriba hacía frío, y el tramo por la cresta hacia el Turó de l'Home lo hicimos rápido, arriesgando más de lo necesario. Fruto de ello dí con mis huesos en el duro suelo rocoso, al deslizarse mis suelas sin remedio en una losa fina, inclinada a 45º y mojada por la lluvia. Sin consecuencias me levanté y me fui rápido a buscar la ansiada sandía del avituallamiento de Sesbasses.
 Una de las pedreras que caen desde Les Agudes, que se asoman en lo más alto, entre la niebla.

 Joan Abellan, que entrenaba casualmente por allí, se unió a nosotros en los últimos metros de la subida a Les Agudes y nos acompañó por la cresta hasta el Turó de l'Home.

 Completando los últimos metros antes de llegar al Coll de Sacarbassa. La nueva subida a Les Agudes fue lo más duro de la prueba.
 
 Bajando desde Les Agudes con Joan Abellan.

 Bajando concentrado para no resbalar.

 Estábamos a los pies del Turó de l'Home, cumbre del macizo a 1.707 m de altitud y km 31 de la prueba. Llevaba 5,5 horas de Travessa.Los últimos 16 kms son completamente de bajada, 1.523 m de desnivel que no se acaban nunca, a través de los hayedos y castañares de Santa Fé y Gualba, de una belleza única. Mi posición debía seguir siendo bastante adelantada a pesar de que me habían pasado varias decenas de corredores, pero la juventud y el nivel de técnica de quienes me pasaban era muy superior al mío. Me sentía cómodo y feliz bajando a Gualba. El fruto de los entrenamientos lo recogía en forma de buenas sensaciones en lugar del desfondamiento habitual de cuádriceps en este duro tramo con tanta bajada.

 Al trote por el tramo desviado del Turó de l'Home. Allí coincidí con Miriam Moreno Castillo, quien acabaría siendo vencedora en la categoría femenina.

 Sorpresa!!! Una salamandra jaspeada. Rara avis. Y casi la pisamos, menos mal...
La salamandra no parecía tener miedo e incluso coqueteaba con la cámara. Otra maravilla de la Travessa del Montseny.

 La llegada a la pista minera de Gualba anticipaba el final de una Travessa del Montseny que se merece uno de los puestos más altos en cuanto a exigencia de desniveles, organización y espectacularidad de paisajes... y buena relación calidad-precio.Llegué a meta satisfecho por todo, parando el reloj en 7h 30m, entrando en el puesto 63 de los casi 500 participantes que decidieron mojarse con nosotros. Valió la pena.

Con Paco, una vez llegamos a meta. Ambos completamente satisfechos y felices.

Agradecer a todos aquellos que durante la prueba en algún momento me animaron ó me saludaron por reconocerme de las historias y experiencias que narro en mi blog. Un saludo a todos.

5 comentarios:

  1. Hola Fran, gran crónica como siempre y gran travessa. Seguro que nos vemos por la Nuria-Queralt. Por cierto gracias por tus consejos sobre la NQ, los tengo en mente.
    Saludos.

    Jose(fondistes routier).

    ResponderEliminar
  2. Hola Fran:

    Caminando con Blas te felicita por tu blog y ha decidido concederte el premio Liebster. Si quieres mas informacion pasate por mi blog:

    www.caminandoconblas.blogspot.com

    saludos

    Blas

    ResponderEliminar
  3. Hola, he intentado contactar por correo pero me da error.

    Un paisano tuyo, Jesus, un tio que corre mucho y que imita a todo el mundo, papa de Elsa (supongo que con estas referencias te sonara) me recomendo tu blog y no se ha equivocado. Admiro tus metas conseguidas. El blog me ha gustado mucho y me he hecho seguidor. El mio esta en estado embrionario pero ya empieza a rodar.

    Una abrazo,

    Joan.

    http://elcaudelabici-joan.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  4. Hola! soy amigo de Jesus! un día te vimos por la montaña con él y otro compañero más. Menudas salidas!

    Te dejo el enlace a mi blog:

    http://manolobtt.blogspot.com.es/

    Manolo.

    ResponderEliminar
  5. Jose, gracias, nos vemos en la NQ, si me ves no dudes en saludarme, que es que yo soy muy pero que muy despistado. Un saludo.
    Blas, entro en tu blog y le doy un vistazo.
    Joan, Manolo, encantado de saludaros. En efecto, Jesús es un gran tipo. Gracias por vuestras palabras. Os visito enseguida. Un abrazo.

    ResponderEliminar

Me gustaría saber cual es tu opinión, escríbela aquí debajo: